domingo, 17 de abril de 2011

LA NATURALEZA DE LA MULTIDIMENSIONALIDAD

Hasta muy recientemente, todos los humanos en la Tierra habían nacido como seres de Tercera Dimensión. Eso significa que ellos estaban completamente en el plano o reino material, y su conciencia estaba “encerrada “en la Tercera Dimensión. Ellos funcionan en los primeros tres chakras, el material, el emocional y el mental.
 
Donde había espiritualidad, era usualmente visto como algo externo o algo fuera del funcionamiento normal diario.

El ser de Tercera Dimensión es consciente de sí mismo como un individuo separado y único. No hay sentido real de la unidad o unicidad de la conciencia que es un factor de conciencia superior dimensional. Debido a su sentido de separación, los humanos han construido una sociedad que tiene muy poca conciencia de la interconexión de los seres y acciones.
Y debido a esa carencia de conciencia, los humanos han creado un planeta de tristeza y sufrimiento, donde los individuos no ven la necesidad de ser responsables de sus pensamientos, sentimientos y acciones. El temor de no sobrevivir en el nivel individual, debido a la carencia de recursos, ha conducido a la ambición y desequilibrios que necesitan ser atendidos en orden de crear un hogar en el planeta para todos los humanos.

Los Niños Índigo llegaron con la llave para la Multi-Dimensionalidad. Ellos han nacido dentro de cuerpos de la Tercera Dimensión, pero su conciencia estaba efectivamente en la Cuarta Dimensión y eran capaces de avanzar dentro de la Quinta. Cuando esta “ola” de conciencia Índigo llegó al planeta a principios de los 1970´s, el sendero fue abierto para todos los humanos y para el planeta mismo para avanzar a la Cuarta Dimensión. 



En el nivel de Cuarta Dimensión de Conciencia, los humanos se vuelven concientes de la Ley Universal del Uno conocido también de otra manera como “Conciencia de Unidad”. Esta Ley establece que todos somos Uno, que todos estamos conectados y que cualquier cosa que afecta a uno nos afecta a todos nosotros. Los Niños Índigo portan este conocimiento en su conciencia, y los lleva a ser guerreros para muchas causas que curarán a Tierra y detendrán a los humanos de seguir destruyendo y contaminando su medio ambiente y causando daño a otros humanos.

La Ley del Uno también promueve el entendimiento en los seres Índigos que todos nosotros somos iguales, y que ninguno es más grande que otro. Esta conciencia grupal y percepción grupal son el sendero al futuro de los humanos. Aprenderemos a funcionar cooperativamente y para el bienestar de todos si es que vamos a crear la Nueva Tierra que todos deseamos.

Los Índigos respetan los talentos y habilidades de cada individuo, pero estos talentos no hacen a ninguno mayor que ningún otro. El papel del ego y la auto-importancia no tiene un lugar real en la vida de un Índigo.

Cuando la percepción de un Índigo se abre a la Quinta Dimensión, se vuelve conciente de sí mismo como un Creador. La percepción de Quinta Dimensión ama crear. Todos los sistemas de pensamiento y los sistemas económicos en la Tierra el la actualidad son creaciones de Formas de Pensamiento de Quinta Dimensión que mantenemos en su lugar por nuestro apoyo continuo de estas formas de pensamiento.
Ellos forman una rejilla de Quinta Dimensión alrededor de la Tierra. La mayoría de los seres dimensionalmente inferiores son completamente inconscientes que sus pensamientos y comportamiento está siendo controlado desde este nivel.

Cuando la conciencia Índigo se abre a este nivel, hay con frecuencia un rechazo de todos los sistemas de creencias y hay una conciencia de libertad para crear nuevas y alternativas formas de pensar y ser. La persona Índigo toma acepta la misión planetaria de crear y traer nuevas maneras de pensar y ser para el planeta Tierra. Pero en este nivel la conciencia todavía tiene que ver con las dualidades de “bueno” o “malo”, que determinan que tipo de sistema de mejor para la Tierra. El siguiente paso en la conciencia es moverse más allá de la dualidad y entrar a un reino donde todo parece ser parte del más grande bienestar y para el bienestar de la gran totalidad.

Este estado avanzado es conocido como Conciencia de Sexta Dimensión, y es el reino del Niño Crístico (Cristal) o Niño Mágico. Todos los niños Cristal han nacido en este nivel de conciencia. Ellos tienen acceso inmediato a los aspectos mágicos y espirituales de quienes ellos son y ellos son capaces de combinar imaginación y creación en formas fantásticas y alegres. Si ellos fueran dejados a sus propios dispositivos, ellos inmediatamente crearían un planeta mágico. Pero, ellos todavía tienen que tratar grandemente con la conciencia de la Tercera Dimensión, y ellos luchan con los patrones y comportamientos que ellos encuentran aquí.

Cuando la conciencia de un Índigo adulto hace el cambio al estado o percepción Cristal, ellos entran en esta conciencia de la Sexta Dimensión y se planta la Conciencia Crística. Ellos renacen, en conciencia, como un Niño Crístico o Mágico.
 
Con esto llega una percepción de la alegría de la vida, y del papel de espíritu a través de los seres humanos en este planeta. Entonces toda la vida es vista como mágica y bienaventurada, y toda la vida es dirigida y avanza por medio del trabajo del espíritu. En este punto, el ser entiende el principio de rendirse al flujo de la inmensa ola evolutiva, mientras que aún ejercitan el derecho de ser creadores en el ámbito individual.

La conciencia Crística, cuando ha madurado suficiente en este nivel, puede entonces moverse dentro del nivel de la Séptima Dimensión, donde la percepción se abre a la naturaleza de las misiones espirituales del ser. Un adulto Cristal o Crístico en este nivel esta listo para participar en una misión planetaria como portador de conciencia dimensional superior a otros. El trabajo puede involucrar enseñanzas o curaciones a una gran escala, o puede simplemente ser portador de la energía en el campo su campo áurico para que otros puedan acceder las vibraciones superiores en su propio sendero de ascensión.

El Niño y Adulto Cristal en ese momento portan el potencial para abrirse plenamente al Noveno nivel o Conciencia Crística Total. Esto incorpora el nivel Octavo, o nivel arquetípico, donde el ser tiene control total sobre la historia de su vida en la Tierra, y el Noveno nivel, donde el ser asume responsabilidad plena para la mayordomía del planeta. 


 Fuente: Bilbioteca las Pleyades 

No hay comentarios:

Publicar un comentario